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Una buena alimentación es el pilar central de una salud fuerte y muchos alimentos pueden ayudarnos a reforzar aquellos aspectos de nuestra salud que no están tan fortalecidos como nos gustaría. Todos somos conscientes de que una alimentación variada ayuda a fortalecer nuestro organismo y que debe constar de una variedad de alimentos suficiente que cubra todas nuestras necesidades de hidratos de carbono, grasas, proteínas, vitaminas, minerales… Pero ¿qué podemos comer si sufrimos de sinusitis? ¿Qué alimentos son beneficiosos para aliviar los síntomas o reducir los episodios más severos?

1.- Alimentación con probióticos:

Una alimentación rica en probióticos reduce el riesgo de infecciones de las vías respiratorias altas. Los probióticos ayudan a nuestro cuerpo a reforzar el sistema inmunitario, y, por consiguiente, ayuda a reducir las infecciones de las vías respiratorias altas y a mantener controlado el equilibrio de bacterias.  Además de mejorar nuestro sistema inmunitario los probióticos ayudan a digerir alimentos difíciles y a absorber mejor los nutrientes. Sin embargo, el efecto de los probióticos puede variar en función de su tipo y de la cantidad que lleguen vivos al intestino.

Entre los alimentos probióticos naturales más populares encontramos:

  • Yogur: Importante que el yogur no haya sido pasteurizado y sea natural, para que contenga suficientes probióticos vivos. Deberías poder encontrar esta información en la etiqueta del producto.
  • Aceitunas y encurtidos: Sorprenderá a muchos, pero las aceitunas o los pepinillos encurtidos son ricos en probióticos  ya que estos nacen en su proceso de fermentación.
  • Queso fresco: Si eres amante del queso, estás de suerte, el queso fresco es rico en probióticos, igual que en el caso de la leche, es preferible que no sea pasteurizado y además comentar que de el queso de oveja o cabra tiene más cantidad de probióticos que el queso de vaca.
  • Kefir: Muy habitual de la gastronomía turca, el Kefir es una fermentación láctea con bacterias y levaduras que lo hacen muy rico en probióticos.
  • Miso: Imprescindible de la gastronomía japonesa y original de china, el miso es una pasta de fermentación de soja y koji (un hongo que se añade al arroz para provocar la fermentación). Solo tenemos que diluir un poco de esta pasta en sopa para enriquecerla con estos probióticos vegetales. Importante: ¡no hervirlo! Para asegurar la supervivencia de un máximo número de probióticos. 

2.- Vitamina D:

Unos niveles bajos de Vitamina D se asocian a casos de sinusitis y aumento de los pólipos nasales. La vitamina D interviene en el proceso de absorción del calcio y también en el fortalecimiento del sistema inmunitario. La fuente principal de vitamina D es la exposición al Sol, y con tomar el sol, unos 10 o 15 minutos tres veces a la semana, es suficiente para proveer al organismo de la vitamina D suficiente, pero en según que zonas, sobretodo si vivimos en zonas no muy soleadas, hay que recurrir a fuentes adicionales de vitamina D.

Las principales fuentes alimentarias de vitamina D son:

  • Pescados grasos: atún, sardina, caballa y salmón. También es una buena fuente de vitamina D el marisco.
  • Hígado: principalmente el de conejo o ternera
  • Leche, huevo o mantequilla.
  • Carne roja.
  • Champiñones.

3.- Alimentación rica en zinc:

Los alimentos ricos en zinc reducen el riesgo de sufrir sinusitis o resfriado común. El zinc es un mineral clave para el organismo, y el cuerpo humano no es capaz de sintetizarlo por si mismo, así que la única forma de obtenerlo es ingiriendo alimentos que lo contienen. El papel del zinc en el organismo es el de ayudarnos en la cicatrización y crea hemoglobina, además de participar activamente en cientos de reacciones enzimáticas y protegiendo el cuerpo del daño oxidativo.

Podemos obtener la cantidad suficiente de zinc si incluimos en nuestra dieta:

  • Carne: La carne magra de cerdo es rica en proteínas, en vitamina B y zinc. La carne de res, por su parte, es una de las carnes con mayor contenido en zinc. Elige preferiblemente carne orgánica para evitar sustancias químicas, antibióticos u otro tipo de sustancias que pudieran haber administrado al animal.
  • Chocolate negro: Un motivo más para comer chocolate si es que te gusta. El chocolate, principalmente el chocolate negro con una alto porcentaje en cacao es rico en antioxidantes, magnesio y zinc.
  • Arroz integral: Siempre es recomendable comer productos integrales, puesto que han sufrido menos procesado en su elaboración y mantienen mejor las propiedades. El arroz integral, es un cereal rico en zinc, potasio, magnesio y selenio y además contiene menos azúcar que su versión blanca.
  • Huevos: Encontramos mayor porcentaje de zinc en la yema, aunque hay la creencia popular de que comer huevos aumenta los niveles de colesterol en sangre, estudios recientes demuestran que comerlos moderadamente no son perjudiciales en la dieta. El huevo además es rico en muchas vitaminas como A, E, D y K.
  • Marisco: Los crustáceos especialmente son ricos en zinc, principalmente el cangrejo y las ostras, el marisco, dado su alto contenido en sodio no es un alimento del que podemos abusar, pero como el huevo, consumido con moderación es uno de los alimentos más ricos en zinc. Las ostras, por ejemplo, en alguna de sus variedades contiene 182 miligramos de zinc por cada 100 gramos.

4. Magnesio

En general, no somos conscientes de lo importante que es una alimentación que cubra nuestras necesidades de magnesio, ya que este mineral es clave para la mayoría de funciones vitales de nuestro organismo: sistema inmunitario, anti-inflamatorio y es un mineral que ayuda a nuestro organismo a funcionar correctamente.

La mayoría de las mejores fuentes alimentarias de magnesio son de origen vegetal:

  • Trigo Integral: Como ya hemos comentado, los cereales en su versión integral conservan mayor porcentaje de sus nutrientes, y sin duda el trigo integral se lleva por goleada el premio al mejor alimento en contenido de magnesio. 100 gr. de harina de trigo integral contienen 167 miligramos de magnesio y puedes ingerir esa cantidad en pasta integral de trigo, tostadas de trigo o en cereales.
  • Espinacas: Las espinacas tienen alto contenido en hierro y además magnesio. Es preferible consumirlas crudas en ensaladas, para evitar hervirlas demasiado y que pierdan parte de sus nutrientes, pero también es una opción si no eres muy fan de las verduras crudas.
  • Almendras: A parte de ser un aperitivo saludable, las almendras tienen alto contenido en magnesio y vitamina E.
  • Tofu: La alternativa a la carne si prefieres evitar el consumo de origen animal. El tofu es rico en proteínas y magnesio.
  • Edamame: Las vainas de soja, pueden hacer de aperitivo o de complemento a ensaladas. Tienen un gran sabor y además también son ricas en magnesio.
  • Aguacate: Este súper alimento es rico en grasas monoinsaturadas, las grasas buenas, con un gran valor nutricional y con un elevado porcentaje en magnesio.
  • Chocolate negro: porque nunca hay suficientes motivos para comer chocolate. El chocolate negro, a parte de ser rico en zinc, es rico en magnesio y, además, su consumo eleva los niveles de oxitocina. Comer chocolate, a parte de ser bueno para nuestra salud, hace feliz.

5. Evita los alimentos con salicilatos

Evita los alimentos que contengan salicilatos (y la aspirina) ya que empeoran los síntomas de sinusitis. También es recomendable una dieta baja en silicatos en las personas que acostumbran a sufrir episodios de alergia. Antes de llevar a cabo una dieta pobre en salicilatos es conveniente que un médico realice un estudio hepático de las enzimas que evitan la eliminación de los mismos y de la metabolización de los sulfatos.

Muchos alimentos que llevan aditivos contienen salicilatos, como colorantes, saborizantes o edulcorantes. Recomendamos una dieta lo más natural posible en estos casos, evitando el consumo de alimentos procesados.

Los alimentos que no contienen salicilatos:

  • Frutas: Higo, granada, papaya, plátano, pomelo, naranja, lima, manzana y piña.
  • Vegetales: Endibias, rábano, lechuga romana, guisantes, col, col rizada, col lombarda, puerros, cebollino, apio…
  • Legumbres: Guisantes, garbanzos, lentejas y edamame.
  • Frutos Secos: Almendras, cacahuetes, piñones y pistachos.

Como veis, una dieta rica, variada y sabiendo qué comer en caso de sinusitis para reducir en la medida de lo posible los síntomas asociados a la sinusitis puede ser muy fácil, la mayoría de alimentos forman parte de nuestra dieta diaria. Además que si tenéis cualquier duda sobre vuestro tratamiento o necesitáis consejo sobre la sinusitis podéis poneros en contacto con nosotros y ¡estaremos encantados de ayudaros!