Poco se habla de los efectos psicológicos que puede acarrear sufrir sinusitis de forma continuada y recurrente.
La sinusitis es una enfermedad común, con una prevalencia del 6-15% en casos de sinusitis aguda y de un 5-12% en casos de sinusitis crónica. La sinusitis es una enfermedad desconocida en muchos niveles e infra diagnosticada por los médicos.
Un diagnóstico generalmente erróneo que supone un importante coste para la sociedad en términos de consumo de atención médica y pérdida de productividad
¿Qué efectos tiene la sinusitis en la salud mental de las personas que la sufren?
La sinusitis no pone la vida en peligro.
Sí produce síntomas, muy molestos, como: dolor facial, congestión nasal y pérdida de olfato… Que cuando se cronifican acarrean una muy pobre calidad de vida para aquellos que la sufren.
En la actualidad se dispone de cuestionarios fiables y válidos que permiten cuantificar la calidad de vida en numerosas enfermedades. La información obtenida con estos cuestionarios proporciona información valiosa sobre el bienestar del paciente y su capacidad para manejarse en sociedad.
En la sinusitis crónica, los cuestionarios muestran una baja calidad de vida de los pacientes.
La calidad de vida de un paciente de sinusitis crónica no solo es peor que la de la población general, si no que es peor que la de personas que padecen otras patologías severas como: hipertensión, diabetes, dolores crónicos…
Esta pobre calidad de vida se debe a que cuando la sinusitis se cronifica produce un gran deterioro en la vida familiar, social y laboral de aquellos que la padecen.
Un estudio reciente realizado en Corea, demostró que las personas que padecen sinusitis crónica son más propensas a la depresión y la ansiedad.
En comparación con las personas sanas, las personas diagnosticadas de sinusitis crónica tenían un 41% más de probabilidades de desarrollar depresión y un 45% más de probabilidades de desarrollar ansiedad, según el estudio.
¿Estos efectos en la salud mental son consecuencia de la sinusitis?
Aunque la depresión y la ansiedad comúnmente acompañan a la sinusitis crónica, no está claro si estos efectos de salud mental preceden o siguen a los problemas de los senos nasales. Es decir, ansiedad y depresión serían factores predisponentes para padecer sinusitis aunque se desconoce por que mecanismo.
El investigador principal del estudio contempla la hipótesis de que la inflamación en la sinusitis provocaría la liberación de ciertos neurotransmisores químicos que afectarían la función cerebral, lo que en combinación con aspectos genéticos y otros factores serían la causa de los problemas psiquiátricos.
Eso no quiere decir que si no se trata la sinusitis se sufran efectos a nivel de salud mental, pero que es recomendable buscar consejo de profesionales competentes, especialmente otorrinos para confirmar el diagnóstico y tratar la sinusitis adecuadamente previniendo así las posibles complicaciones en todos los aspectos y mejorando la calidad de vida.
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